06 mayo 2011

Innovadental 0* - 0 Cafetería Aquelarre (penaltis 2 - 1). César, ¡¡¡HÉROE!!!

Que sí joder que sí. Que estoy un poco ebrio. El contentillo justo para no perder habilidad con las teclas. Hoy el alcohol era necesario. Fundamental para celebrar el pase a toda una final. Mira que sufrimos… lo pasamos mal, con los huevos de corbata, hasta que el tiempo del marcador llegó a cero.

El partido pintaba muy chungo desde que Gabriel, por una vez literalmente falto de sangre, causase una baja importantísima en nuestra defensa. Y no sólo eso. El balón echó a rodar y desde un primer momento el Aquelarre fue mejor. Llegaban hostias de babor y de estribor. Por arriba y por abajo. En corners, faltas y jugadas. Pero ¡ay amigo! Ahí apareció el hombre. El héroe. En los uno contra uno, en remates de cabeza, en tiros a bocajarro. Qué pena que no hubiese una cámara filmando. Porque se me acaban los calificativos para describir la actuación de César esta noche. Hay que bajarse los pantalones y decir que estamos en la final gracias, en un porcentaje altísimo, a él y sólo a él.

Nos defendimos como gato panza arriba, dejando el alma en la pista. En muchos, muchísimos casos, inútilmente. Son demasiado hábiles para nosotros. Es así y punto. Pero entonces aparecía una mano salvadora. No importó que se descoyuntara un dedo, como él mismo dijo, cerca del final. Él siguió ahí, parando y dándonos esperanza. Gracias. Y gracias también a los palos. Recuerdo por lo menos tres veces en que retumbó la portería…

El resto del equipo… luchamos, corrimos. Incluso las tuvimos y muy claras. Recuerdo una de Jacobo en la que todos cantamos gol. Y otro jugadón de Oubel que sacó el portero abajo. Qué gran partido por cierto el de nuestro defensa. Igual que el de Junior, sencillamente imposible de regatear. En general, como no podía ser menos, todos entregados al máximo al borde de nuestras limitaciones. Respetando a un rival que también nos respetó. Creo que desde fuera se vio el miedo general a perder también por su parte. Incluso al final parecieron dar por bueno un desenlace en la tanda de penaltis. Como nosotros, para qué negarlo.

Y ahí volvieron a aparecer César y el palo, en una ocasión cada uno para que fallaran dos veces. Algo que no hicieron Yuki y Quique para convertir nuestros dos lanzamientos y meternos en la final. Con sufrimiento, pensando que de un momento a otro nos meterían el gol y abur copa. Pero no fue así. Y fue un cero cero totalmente atípico en un partido de fútbol sala, digno tan solo de dos grandes equipos que por cierto, no causaron mayor polémica para Pepe y dieron muestras de deportividad al final, fundiéndose en saludos y abrazos.

Una gran noche. Y mañana, la final ante el Rima. El trabajo no ha finalizado todavía.

1 comentario:

  1. Casi mejor que no hubiera una cámara filmando que a lo mejor nos lo lleva ElPozo Murcia (este año han tenido un lío gordo con los porteros: se les lesionaron los dos del primer equipo, después el del filial, y luego el que ficharon como sustituto). Enhorabuena a todos, en especial a César por su inhumana actuación!!

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