Caf. Aquelarre 0 - 3 Innovadental. Victoria crucial que nos pone el título en bandeja

Sí, habéis leído bien. ¡Hemos ganado! Al fin superamos a nuestra bestia negra. Ahora el título está más cerca tras un partido muy tenso, quizá el más tenso desde que Innovadental existe, pero que por una vez acabó con el marcador a nuestro favor.

Empezaba el partido sin Bruno (una pena, su calidad les hubiera hecho mucho daño) y un cuarto de hora más tarde de lo anunciado; al parecer venía mal el calendario y nosotros no nos enteramos hasta llegar allí. Un cuarto de hora más de nervios que no desaparecieron hasta que echó a rodar el balón. Cuando lo hizo sucedió lo de casi siempre en nuestros enfrentamientos. Mucho respeto y pocas ocasiones. Veíamos que dominábamos un poco más y no llegaban mucho, pero cuando lo hacían, eran tremendamente peligrosos. Los palos se aliaron con César y hasta en tres ocasiones en la primera mitad estrellaron el balón en la madera. El peligro procedía sobre todo a balón parado, con faltas cerca del área, provocadas para cortar principalmente los movimientos de Álex, su delantero, y Fran, que se incorporaba desde atrás. A mayores, César sacó un par de buenas manos y puso incluso la cara para evitar el gol rival.

Por nuestro lado, daba la sensación de que estábamos siendo mejores pero nos costaba hacer daño arriba. Aún así Víctor y Yuki estaban bien y fallaron alguna bastante buena delante del portero. Quique, solo, de cabeza, tuvo la más clara en la primera parte, que trascurría con una tensión en aumento ante las faltas, las protestas y la incertidumbre en el resultado.

Al descanso, como es habitual, llegamos sin goles y quien más quien menos nos decíamos en el vestuario que sucedería lo de siempre. Pondrían a jugar a Quique, su portero, uno de los mejores jugadores del torneo, y empujarían hasta acabar marcando. Sin embargo el cambio de portero no nos vino mal. A los dos minutos, un pase de Junior lo aprovechaba Víctor para marcar por abajo tras un disparo con poco ángulo.

A partir de ahí se volcaron, y con alguna falta más, un nuevo tiro al palo y varias paradas de César pudimos mantener el resultado. Atrás, Gabriel estuvo inmenso para defender a Álex, el segundo máximo goleador de la liga, y Junior y Quique también muy centrados cortando balones y sacándolos con criterio. Incluso Oubel, Jacobo y los hombres de arriba ayudaron eficazmente en labores defensivas, muy exigidos los cuarenta minutos. A unos diez del final, Gabriel robaba el balón para iniciar una contra y servir a Álex, que condujo el ataque y finalizó con un disparo muy preciso al segundo palo y poner distancia en el marcador.

Desde ese momento no se vio mucho fútbol. Ellos se salieron del partido, desquiciados ante nuestra intensidad que muchas veces se transformaba en faltas tácticas para cortar el peligro. Hubo varios piques con Oubel, Junior y Gabriel como protagonistas por nuestro lado, sin mayores consecuencias que una amarilla para los dos últimos por sendas faltas. Cuando quedaban cinco minutos, Yuki recogió un balón suelto para batir por bajo al portero en el mano a mano y sentenciar el choque.

Hasta el final, más tensión, muchas palabras, incluso insultos, poco juego, y Pepe que no sabía muy bien que hacer, aunque en general ningún equipo se puede quejar de la actuación del árbitro. Apenas hubo más ocasiones, sólo un nuevo mano a mano que fallaba Yuki. Lo peor sucedió a falta de un minuto. Un rival (cuyo nombre no sé y cuyo número no recuerdo), lanzó una falta que rechazaba la barrera. Junior protegió el balón para que César lo atrapase. Entonces el que había lanzado entró en el área y dedicó a la afición una patada a la rodilla de Junior tipo la de Vagner a Tristán, ¿os acordáis?, con la cabeza de César también por el medio. El lío estaba montado. César se levantó y lanzó la pelota a la cara del nuevo Vagner. Gabriel era “placado” e inmovilizado por Fran (para bien de todos) para evitar que se acercase al agresor de su hermano, y en medio, un tumulto de unas diez o doce personas entre los que intentaban dar (patada voladora de su defensa Dani incluida) y los que querían separar, que afortunadamente éramos más. Saltaron incluso los jugadores de los banquillos y aficionados, sin que hubiese que lamentar incidentes mayores que los insultos, las amenazas y las expulsiones de Oubel y del agresor.

Unos instantes muy tristes que nunca debieron haber existido y que no deben empañar lo que hasta entonces había sido un partido muy tenso, con faltas, con agresividad incluso, pero sin mayor intención que la de defender y luchar por una victoria que suponía más de medio título para el ganador.

Afortunadamente ésos fuimos nosotros y fue una alegría en el vestuario y, personalmente, hacer la crónica de un partido importantísimo para nuestro equipo. Ahora nos queda quizá algo más difícil, que es no confiarnos en ninguno de los ocho partidos que nos restan para finalizar la liga. Hay equipos muy buenos y que nos han hecho daño en la primera vuelta. Los fallos ahora nos saldrían más caros que nunca.

Debemos señalar algunas conclusiones tras el partido. Primero, que ellos son un equipazo. Individualmente creo que cuentan con el mayor número de “cracks” de la liga, jugadores rapidísimos, muy hábiles y que casi todo lo hacen bien, también en defensa. Son campeones por algo. Por nuestro lado, creo que al margen de los goleadores fueron vitales César, como casi siempre, y Gabriel, que jugó prácticamente los cuarenta minutos y a gran nivel. Yuki fue nuestro toque diferente con respecto a otros duelos ante este equipo. Víctor estuvo muy bien creando peligro y comprometido también a la hora de defender. Junior y Quique no cometieron errores; muy bien ambos. Oubel y Álex jugaron menos minutos, aunque demostraron su compromiso con la importancia del partido y Jacobo, como siempre, se mostró muy polivalente y cumplió en todas las facetas del juego. Sólo de esta forma, con la entrega y la intensidad de todos los jugadores, hemos podido hacernos con la victoria más importante desde que Innovadental nació el año pasado.

Por último, agradecemos a la afición (más “multitudinaria” que nunca) su apoyo, tanto a los habituales como a Rainer, Héctor y Cobas, ex-jugadores del equipo. Esperamos que todos hayáis disfrutado de la victoria; sentimos lo que pasó en el último minuto y esperamos vuestros ánimos de aquí a final de temporada.